Milli mála - 05.07.2016, Blaðsíða 243

INGRID LINDSTRÖM LEO

Milli mála 7/2015

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timocracia (la gobernación militar) y la oligarquía. Opinaba este filó-
sofo que la democracia, al crear igualdad entre ricos y pobres, bue-
nos y malos, personas competentes e incompetentes, engendraba
desorden, injusticia y una falsa libertad que conducirían primero a la
anarquía general y luego a la tiranía de algún demagogo. Conviene
recordar que, para Platón, no existía ni podía existir igualdad entre
grupos sociales. Afirmaba que en la sociedad había personas cultas,
a saber, los filósofos, aptas para gobernar, y otras personas, o grupos
de personas, que tenían formaciones o tradiciones adecuadas para
ser militares, campesinos, productores, artesanos etcétera9.
Dicho de otra manera, para Platón, la jerarquía social existía por
naturaleza y, por consiguiente, los oficios dependían del rango social
y de la preparación intelectual o práctica de cada uno de los ciuda-
danos. En la cumbre de la jerarquía social platónica se encontraba
una cantidad reducida de hombres (las mujeres no contaban entre
los ciudadanos) dotados de sabiduría, prudencia y de otras virtudes.
La democracia, argumentaba Platón, haría que el poder cayera en
manos de personas carentes de tales virtudes, y así se perjudicaría
no solamente el orden social establecido, sino también el bien
común.
En la edad moderna, posiblemente a raíz de que la filosofía
clásica había vuelto a ganar terreno durante el Renacimiento, pero
sobre todo a partir de las revoluciones de Estados Unidos y luego
Francia, se habló preferentemente de República. La República, en-
tonces, englobaba reformas que beneficiaban, si no a todos, al me-
nos a mayores partes de la sociedad que antes, por ejemplo, a la
creciente burguesía en la era del primer industrialismo. Giovanni Sar-
tori lo expresa de la manera siguiente: “durante milenios el régimen
político óptimo se denominó república (res publica, cosa de todos) y
no democracia”10. Este filósofo italiano cita a Kant, quien, ya en
1795, escribía que la democracia “es necesariamente un despotismo”,
porque implica “la tiranía de la mayoría”.

9 Fernando López Acosta, “Platón: vocabulario, textos, comparación”, 2009,
http://es.slideshare.net/flacosta/platon-1951370 [Extraído el 30/10 2015].
10 Giovanni Sartori, “Democracia”, http://es.scribd.com/doc/88322440/giovanni-
sartori [Extraído el 04/08 2014].