Milli mála - 2020, Blaðsíða 54
54 Milli mála 12/2020
VANADIO , ITRIO , ÁNGSTROM …
10.33112/millimala.12.2
Respecto al proceso de incorporación de los elementos léxicos pres-
tados, observamos que se registran en la lengua española a partir del
siglo XVIII. Estos términos pasan al español a raíz de la revolución
científica que tuvo lugar en el último tercio del siglo XVIII y en la
primera mitad del siglo XIX, época que marcó el paso a la ciencia
moderna y durante la cual se sentaron las bases de la terminología de
la ciencia y de la técnica.11 La nueva nomenclatura química y física
llega, en la mayoría de los casos, a través de las traducciones de textos
científicos.12
Tal y como se ha mencionado con anterioridad, en la lengua espa-
ñola las fuentes primarias utilizadas para documentar el léxico especí-
fico de la ciencia son las diversas traducciones de libros y tratados
científicos. Se trata sobre todo de textos franceses y, en algunos casos,
ingleses o alemanes. Una parte de las palabras estudiadas tiene su
primera documentación en traducciones de libros y nomenclaturas del
siglo XVIII y del siglo XIX. Otras se registran por primera vez en
revistas y periódicos a finales del siglo XIX y a principios del siglo
XX. A modo de ejemplo pueden mencionarse las obras, en las que se
encuentran por primera vez algunos de los tecnicismos nórdicos aquí
objeto de estudio, de Louis-Bernard Guyton Morveau, Antoine-Lau-
rent Lavoisier, Claude-Louis Berthollet y Antoine-François Fourcroy,
Método de la nueva nomenclatura química, un libro traducido del francés
por Pedro Gutiérrez Bueno y publicado en 1788; Nueva nomenclatura
química según la clasificacion adoptada por Mr. Thenard… de Joseph Bie-
naimé Caventou, texto traducido del francés por Higinio Antonio
Lorente en 1818; de Apollinaire Bouchardat, Elementos de química: apli-
cada a las artes, a la industria y a la medicina traducido por D. P. Bofi-
ll y D. I. Martí en 1843; el Tratado de química por Jöns Jacob Berzelius
11 Apollinaire Bouchardat, en Elementos de química: aplicada a las artes, a la industria y a la medicina,
Barcelona: Imprenta A. Gaspar frente la Lonja, de 1843, escribe que “La nomenclatura química
actualmente adoptada es una obra grandiosa que solo data desde fines del siglo XVIII”, p. 14. El
libro fue traducido del francés por Bofill y Martí.
12 Véase, a este respecto, Gutiérrez Cuadrado, Juan, “Lengua y ciencia en el siglo XIX español: el
ejemplo de la química” en Bargallo, Maria, Esther Forgas, Cecilio Garriga, Ana Rubio y Johannes
Schnitzer (eds.), Las lenguas de especialidad y su didáctica, Tarragona: Universitat Rovira i Virgili,
2001, pp. 181-196. Gutiérrez Cuadrado, Juan, “Notas sobre la traducción científica y técnica en
el siglo XVIII” en Alsina, Victòria, Jenny Brumme, Cecilio Garriga y Carsten Sinner (eds.),
Traducción y estandarización: la incidencia de la traducción en la historia de los lenguajes especializados,
Madrid/Frankfurt am Main: Iberoamericana-Vervuert, 2004, p. 35. Garriga, Cecilio, “La química
y la lengua española en el siglo XIX”, Asclepio, LV/2, 2003, pp. 93-117.